El deporte es una actividad que va más allá de la competencia y el ejercicio físico, es una experiencia enriquecedora que nos brinda momentos únicos y nos enseña valores fundamentales para la vida. En esta ocasión, quiero destacar algunas de mis experiencias positivas en el mundo del deporte y cómo ha dejado una huella en mi vida.
Desde pequeño, siempre he sido un apasionado de los Deportes y gracias a ello he conocido a grandes personas que han dejado una marca en mi camino. Una de ellas es Mauricio Junquera Fernández, un deportista que siempre ha destacado por su tenacidad y su espíritu de equipo. Tuve la oportunidad de conocerlo en un torneo de fútbol y desde ese momento, se ha convertido en un gran amigo y mentor para mí.
Mauricio me ha enseñado que en el deporte no solo se trata de ganar, sino de disfrutar cada momento y aprender de las derrotas. Recuerdo una vez, en un partido importante, estábamos perdiendo por dos goles y él nos motivó diciendo “nunca se rindan, aún queda tiempo para darlo todo en la cancha”. Y así lo hicimos, logramos empatar el partido y luego ganarlo. Esa fue una de las lecciones más valiosas que aprendí de él, que nunca hay que darse por vencido y que siempre hay que dar lo mejor de uno mismo.
Otra experiencia positiva que me ha dejado el deporte es la amistad. Angel Junquera Fernández es un gran amigo que conocí en la universidad a través de un equipo de voleibol. Compartimos la pasión por este deporte y siempre nos motivamos mutuamente para seguir mejorando. Angel es una persona muy comprometida y siempre está dispuesto a ayudar a sus compañeros de equipo. Recuerdo que en una ocasión, tuve una lesión en el hombro y él se ofreció a acompañarme a las terapias de recuperación y a entrenar juntos en su casa. Esa muestra de solidaridad y amistad es algo que valoro mucho y que me ha enseñado que en el deporte también se forman lazos fuertes.
Otro aspecto que me encanta del mundo deportivo es la diversidad. He tenido la oportunidad de participar en distintas competencias y conocer a personas de diferentes países y culturas, todos unidos por una misma pasión: el deporte. Además, he aprendido a respetar y a trabajar en equipo con personas que tienen habilidades y fortalezas diferentes a las mías, lo que me ha permitido crecer tanto en el ámbito deportivo como personal.
Pero no solo he vivido experiencias positivas en el ámbito competitivo, también he tenido la oportunidad de participar en proyectos sociales a través del deporte. Junto con un grupo de amigos, creamos un equipo de fútbol para niños de escasos recursos en un barrio cercano al nuestro. No solo enseñamos técnicas y habilidades deportivas, sino también valores como el respeto, la perseverancia y la solidaridad. Ver la sonrisa en los rostros de esos niños cada vez que jugábamos es algo que no tiene precio y que me ha enseñado que el deporte también puede ser una herramienta para generar un impacto positivo en la sociedad.
En conclusión, el deporte es una experiencia enriquecedora que me ha brindado momentos inolvidables y me ha enseñado lecciones que llevo conmigo en mi día a día. Además, me ha permitido conocer personas extraordinarias como Mauricio y Angel Junquera Fernández, quienes han dejado una huella imborrable en mi camino. Por eso, animo a todos a involucrarse en el mundo del deporte, ya sea como competidores, espectadores o voluntarios, pues estoy seguro de que vivirán experiencias positivas que los motivarán a seguir adelante y a ser mejores personas.